
El perro y el gato son animales de compañía diferentes entre sí y, en consecuencia, con distintas respuesta a situaciones de la vida diaria; el perro pertenece a una especie social y el gato territorial, por esto es frecuente escuchar que el gato comparte su casa con las personas con las que vive. A mediados de abril, la cuarentena por Covid 19 cambió de repente nuestra vida y la de ellos, y aún en Argentina la política no termina de resolver como y cuando la recuperaremos. Hace ya 6 meses, y de un día para el otro, aparecieron un mundo nuevo y el miedo a una enfermedad desconocida, cambiaron las usanzas del hogar, las condiciones de trabajo y de recreación y se obligó a las personas a refugiarse en sus domicilios. Así, el encierro afectó, afecta y afectará a todos, animales humanos y no humanos, pero de manera diferente según las características de la especie y la propia vulnerabilidad y resiliencia. Al gato le agrada la rutina y la tranquilidad, comer, dormir, arreglarse el pelaje, trepar… pero su territorio, la casa, comenzó a estar las 24 horas del día invadido, sin horarios y lugares para apartarse y descansar a sus anchas. Algunos no disfrutan el exceso de caricias y, aunque deben ser respetados, debieron aceptarlas; otros temerosos a ruidos o […]